Salmos 133:1 - Mirad cuán bueno y cuán delicioso es
Habitar los hermanos juntos en armonía
Como parte de nuestra Identidad Pentecostal, es muy común escuchar la repetición de frases y versos bíblicos no solo durante nuestros servicios o momentos de oración y adoración, sino que al ser Vividores Activos de la Palabra, en todas las facetas y escenarios de nuestra vida, solemos pronunciar frases y versos bíblicos que vayan de acuerdo a lo que estamos viviendo o experimentando. Quizás podemos recordar haber escuchado a alguien en soledad decir; “El Señor es mi Pastor, y nada me Faltará,” quizás hemos escuchado a algún enfermo decir; “El Señor es mi Sanador,” mientras que familias fervientes también podrán decir; “Yo y Mi Casa serviremos a Jehova.” Estas son solo algunas de las poderosas frases y versos bíblicos que es común pronunciar, pues su entendimiento es preciso, y su efecto es certero. Todo aquel que las escuche, aun sin conocer a Jesus o el contexto del verso, podrá comenzar a abrazar el significado de tales palabras, para así despertar su interés por el Autor de las mismas. Así como en la Biblia y en los tiempos de la ley, la REPETICIÓN de la Palabra sigue siendo crucial y edificante para nuestras vidas. Si el mundo no se cansa de anunciar malas noticias y de pronunciar las mismas frases seculares que tanto el mundo ama, la iglesia mucho menos puede dejar de pronunciar no frases vacías como las del mundo, sino Palabras de Vida, aquellas que Pedro anhelo seguir escuchando. Quizás no lo notemos, pero siempre habrá un Pedro en nuestros alrededores que necesitará y anhelará escuchar Palabras de Vida, aun dentro de sus momentos Funebres. Como Iglesia, ¿qué es aquello que solemos repetir? ¿que frases abrazamos, que pronuncian nuestros labios?
Para Reflexionar...
Bajo este concepto de la repetición, muchos podremos traer a memoria el verso de base para este escrito, el Salmo 133 versículo 1, donde se nos recuerda la importancia pero también la Gloria de la Unidad y Armonía entre las Familias y la Iglesia del Señor. Es común escuchar este verso bíblico y conformarnos con su Hermosura, y no ser redargüidos por su Profundidad. Los Salmos, aún al ser Cánticos y Poesía, pueden contener un nivel de Profundidad que siempre está en reserva para aquellos dispuestos a ir más allá. Este verso es mucho más que decir que Dios nos quiere unidos en un mismo sentir y pensar, no es solo la acción de la Unidad, sino también Su Armonía y Propósito. Para desglosar y entender esta porción un poco más de lo que solemos hacer, enfocaremos tres componentes de la misma. Notemos una breve Tricotomía que es digna de escudriñar; esta tricotomía contiene los términos: “Bueno, Juntos, y Armonía.” Estos términos nos servirán como un puente hacia el entendimiento, el cual luego de caminar en él, seremos tan bendecidos que no cesaremos de Repetir estas Palabras, y mucho menos dejaremos de Vivirlas.
El primer término, lo encontramos al Salmista decir que Habitar Juntos en Armonía es algo “BUENO.” Entre las varias definiciones y usos que tal término en el original poseía, existen tres que captan mi atención, algo “BUENO,” podía referenciar algo: “Agradable, Deseable y Eficiente.” Por lo tanto, el Salmista comienza diciendo que Habitar Juntos es una acción que Agrada, que al permanecer Juntos esto traerá un efecto positivo en nosotros y alegra nuestras almas. En muchas ocasiones, nos sentiremos conforme a lo que nos rodea, lo que escuchamos y lo que vemos, si la persona centra su vida con buena compañía y un ambiente espiritual, definitivamente tendrá una vida agradable ya que podrá alimentarse de otros compañeros de la Fe, que comparten su misma creencia, padecimientos, y también victorias. El Salmista también nos demuestra que Habitar Juntos no es solo algo “BUENO,” sino que también es una acción que debe siempre “DESEAR.” Es algo que no solo debemos procurar en nuestras reuniones evangélicas, sino en todo momento que sea posible. Es necesario recordar que no necesitamos estar CERCA para estar JUNTOS, pues aun con Distancia, es posible estar unidos en ESPÍRITU. La Iglesia Triunfa cuando se Reune, pero también Alcanza mucho en la Distancia. No podemos pasar por alto la tercera definición, El Salmista también nos recuerda que Habitar Juntos es algo “EFICIENTE.” La Iglesia no solo se reúne por reunirse, sino que también existen momentos donde quizás batallamos para orar solos en la casa, pero al unirnos en un lugar, tomamos fuerzas de los demás, quizás no entendamos bien la Biblia por nuestra cuenta, pero al unirnos a alguien, comenzamos a sentir la luz del entendimiento. Esto es debido a que la Iglesia suele ser Eficiente al estar juntos, pues la Iglesia no fue Establecida para vivir Aislada, sino para vivir Unida. Una Iglesia que Habite Junto a sus Hermanos, sentirá lo AGRADABLE, DESEARA la unidad, y será EFICIENTE en sus obras.
El segundo término, lo vemos cuando el Salmista nos recuerda que no es solo “ESTAR” juntos, sino “HABITAR” juntos en Armonía. Este término en su original era mayormente utilizado para hacer referencia a “PERMANECER,” a “QUEDARSE” firme en algo. El Salmista no nos está invitando a una vida de “VISITACIÓN,” sino de “HABITACIÓN,” donde todos nos sentimos partes equivalentes del cuerpo de Cristo, con necesidades y metas similares, dependientes del mismo Dios. Es ahí cuando se vive el llorar y reír los unos con los otros, es ese sentir de que no has visto un hermano de hace tiempo y sientes que no puedes pasar un dia mas sin verlo o llamarlo. Es cuando la Iglesia expresa su Amor Fraternal, donde todos se abrazan tan fuerte que luego nunca querrán soltarse. El ABRAZO del Cristiano, es un abrazo que nunca termina, aun en la distancia, sentimos los brazos y el corazón de nuestros hermanos, celebrando y padeciendo juntos por la causa de Cristo. Así como el Abrazo de Cristo desde la Cruz aún nos Alcanza, el Abrazo de la Iglesia aun nos Arropa.
El tercer término, lo vemos cuando el Salmista nos recuerda que la Unidad no solo es “BUENA,” y conectiva con la “HABITACIÓN,” sino que también produce “ARMONÍA.” Así como la Unidad necesita la HABITACIÓN y así como resulta en algo BUENO, la Unidad también posee ARMONÍA como su Producto. Es interesante notar que la Armonía es un término utilizado mayormente en el ámbito musical. Cuando se hace referencia a la Armonía, esta va de la mano con la Melodía pero es algo totalmente diferente. La melodía suele ser notas repetitivas que forman un sonido deseado y melódico. Para alcanzar tal sonido, notas específicas tienen que ser tocadas en un patrón hasta crear el sonido. Todas las canciones tienen su melodía, aquella identidad única de cada canción. Sin embargo, una Canción no solo se compone de Melodía, pues aún al crear ese sonido melódico, es como si la canción aún se sintiera vacía o carente de algo. Es ahí donde entre la Armonía, que suele ser un conjunto de acordes y notas que quizás son de un patrono o tonos diferentes a la melodía, pero que aun así, al ser tocados JUNTOS, estos producen una ARMONÍA que acompaña efectivamente la MELODÍA de la Canción. Podemos decir que al igual que una canción, una Iglesia que no tenga Armonía, será carente del mejor acompañamiento, donde al unir notas y acordes de diferentes tonos y escalas, podemos formar un Sonido Extraordinario, lleno de notas que si no fuera por la Armonía, estuvieran solas por su cuenta. El Salmista, conociendo el término musical, el nos recalca que en la Unidad también existe Armonía, pues la Iglesia procura brindar notas y personas de todos los lugares para que juntos, podamos hacer al mundo escuchar el mejor sonido y mensaje que existe, la Palabra de Cristo, y los hermosos dichos de Su boca. En la Armonía no hay egocentrismo, pues cada nota es necesaria para formar el Acorde, cada persona es necesaria para llevar a cabo toda labor, en la Armonía no hay espacio para el YO, pero si para un CUERPO, para un NOSOTROS. Hoy más que nunca, la Iglesia necesita más Armonía, y menos Aislamiento.
La Unidad es un tema mucho más profundo de lo que podamos imaginar, pero con tan solo tres destellos como los que hemos estudiado, somos persuadidos a permanecer en ella, y meditar en la gloria que esconde. La Unidad no solo Une Personas, la Unidad también Produce Destellos hacia todos sus Recipientes.
"La Unidad no solo Une Personas, la Unidad también Produce Destellos hacia todos sus Recipientes"
Autor: Jorge Colón
theoreihub@gmail.com
7.22.2025