Proverbios 16:18 - “Antes del quebrantamiento va la Soberbia, y antes de la Caída, la Altivez de Espíritu. Mejor es Humillarse con los Pobres que repartir Despojos con los Soberbios.”
Salmos 138:6 - Porque Jehova es excelso, y atiende al humilde, mas al altivo mira de lejos
En una ocasión, un fisiculturista muy dotado decidió ir por primera vez a uno de los gimnasios más conocidos, donde grandes competidores y auspiciadores entrenaban. Al entrar y comenzar su rutina de ejercicios, el nota como muchos lo observaban y notaban cada movimiento que él hacía. Motivado por la reacción de los otros, comenzó a levantar las pesas con mayor peso que podía e intentaba posar durante sus pausas para que todos pudieran admirarle. Algunos se le acercaron y le preguntaban cuantas competencias había ganado y en cuanto al régimen al cual el sometía su cuerpo para lograr estar tan definido. De momento, entran al gimnasio unos auspiciadores de la compañía más grande de fitness, ellos habían llegado allí para reconocer hombres y mujeres que estén dando su mejor, aquellos que demostraban pasión por lo que hacían. Al verlos llegar, todos asumieron que se acercarían al nuevo integrante, aquel que ya se había ganado la audiencia tras su Altivez de Espíritu, ya los había Persuadido con su Maña, todos pensaban que era el mejor fisiculturista del lugar. Sin embargo, ven que los auspiciadores le pasan por al lado al nuevo integrante y no le reconocen, siguen su ruta, y llegan donde un hombre que estaba entrenando en un rincón del gimnasio, allí sin hacer ruido, él hacía su rutina sin distraerá a nadie ni promover lo que el hacia. Los auspiciadores dicen en voz alta; “Felicidades, hemos venido a reconocer tu esfuerzo, pues aunque muchos no lo sepan, has mantenido consistencia, pasión, y sobre todo humildad ante todo lo que haces.” Asombrados, todos le preguntaron a los auspiciadores porque no reconocieron al nuevo integrante, ellos no vacilaron en responder; “No buscamos personas con Altivez o con Maña, sino personas Humildes de Espíritu, pero con Grandes Corazones.” “Fuerte no es Aquel que se Exalta, Grande es aquel que Se Humilla.”
Es imposible leer la corta historia y no identificar un gran principio bíblico el cual parece ser olvidado por las modernas generaciones. Debido a la tanta influencia de nuestros tiempos, junto al mundo digital, las oportunidades de mercadeo, entre tanto, lo que la Biblia llama como Soberbia, Exaltación y Altivez, ha pasado ha convertirse en algo normal, donde aquellos que lo hacen, tienen derecho a hacerlo ya que son especiales, conocidos, o mejores que los demás en cualquier índole que ocupen. Es tan común ver escenarios donde al identificar alguien talentoso, la sociedad rápido le aconseja darse a conocer, promocionarse, al punto que esto puede comenzar a crear en la persona un sentido de superioridad, donde su Talento, el cual puede ser una Gran Herramienta, se convierte en una Arma Letal, no para los demás, sino para su Mismo Espíritu. Es aquí donde la persona comienza a olvidar sus raíces, sus debilidades, colocándose en un Trono superior a los demás. Nuestra sociedad y las tendencias junto a muchos que hoy se identifican como “Influenciadores, YouTubers, Tiktokeros, entre otras…” han sido culpables de sembrar Raíces de Altivez en muchos Terrenos donde la Humildad ya se estaba Cosechando. Si hoy pudiéramos pararnos en la Cumbre del Monte más alto, y mirar abajo hacia cada Comunidad, Montaña y Sendero de nuestro mundo, cuántos Árboles de Altivez no veremos Crecidos, y cuántos Terrenos no veremos con Raíces de Humildad? Como diría un gran amigo, donde se ha ido la humildad? ¿Quién la escondió? Dónde caducó? Para reflexionar
Lo alarmante no es que la Altivez resida en nuestra sociedad, es de esperarse que el mundo sea su morada, la preocupación surge al ver que el Proverbista dedica estas palabras no solo a las futuras generaciones, sino también a los futuros seguidores de Jehová, aquellos que también tendrán que cuidar su Espíritu de no caer en la Altivez. La Altivez Mora en esta Sociedad, pero aun así busca Infiltrarse en Corazones que hayan descuidado Su Espíritu. Abro mi corazón al decir lo siguiente, me preocupa que tanta tecnología, promoción de eventos, flyers, toma de fotos, entre tanto, nos haga olvidar la Esencia de la Humildad, y que también nos haga abrazar la Raíz de la Altivez. Es alarmante ver como somos influenciados a vivir al igual que el mundo lo hace, donde si no toman una foto de su comida, es como si nunca la hubieran consumido, donde cada buena noticia tiene que ser publicada en redes, donde todo lo que logramos tiene que ser anunciado. Nuestra Iglesia está siendo influenciada no a promocionar sus Eventos y Victorias en Dios, lo cual no tiene nada de malo, sino que la Influencia es a Enfocarnos en la Promoción y lo Público, y no en la Oración y lo Secreto, pues bien sabemos, que las Victorias que la Iglesia obtiene en Público, es por las grandes batallas que se Ganan en lo Privado. El enfoque de la Iglesia siempre es Ganar las Batallas en lo Secreto, para que Dios sea quien conforme a Su Voluntad nos Recompense a Su tiempo. Nos ha tocado vivir tiempos donde es conveniente que la Iglesia utilice los Recursos Disponibles Tecnológicos para así alcanzar las multitudes, pero el requisito de esto, es que solo lo utilizamos como Herramientas y no como Montañas, donde solo buscamos Servir a la Necesidad, y no Escalar hacia la Altura del más allá.
Es interesante, que la Biblia trabaje tal asunto en diversas ocasiones, primero, el proverbista, siendo un hombre sabia y uno mismo que había vivido la Altivez durante un tiempo de su vida, ahora él busca que otros se libren de tal atrocidad. El desglosa este mal entre dos conceptos, tanto la Soberbia, como la Altivez del Espíritu. Cuando vemos la Soberbia, en su original hacía referencia al “orgullo, la presunción de algo que parecía, pero que no era.” Es como decir, cuando alguien era Soberbio, él pensaba ser alguien equivocado, se creía más de lo que verdaderamente era. Es la etapa donde la mente y el corazón van creyendo tal mentira. Sin embargo, cuando vemos la Altivez, esta se relacionaba más con la ALTURA, con una posición física que también hace referencia tanto a algo ALTO como COMPLETADO. Para entenderlo mejor, si la Soberbia era el Proceso de la Orgullo, la Altivez es cuando ya el Proceso se Completó, y ahora la persona Vive un lugar que considera Más Alto que antes. Es cuando ya la persona está convencida y se siente más fuerte que nunca, sin saber que eventualmente tal Altivez no lo fortalecerá, sino que debilitará sus entrañas hasta llevarlo a un Declive, donde perderá tanto su Altura como su Fuerza. El peligro de la Altivez es muy serio, pues un Espíritu Exaltado, resultará en un Corazón Debilitado. Hoy día podemos ver muchas Columnas Exaltadas, pero con Fundamento Debilitado, muchas personas que conversamos y podemos notar como la Altivez ya los está empezando a consumir, donde tal acción tendrá sus consecuencias, pues recordemos, tal como dijo el Salmista, Jehova mira de Lejos al Altivo, no lo atiende, y donde la Presencia y Ayuda de Dios no dicen presente, habrá oscuridad, declive, y sobre todo, carencia de un Corazón arraigado en Dios. Si Dios es Exaltado, todo el que le Sirve no puede ser Altivo, sino que tendrá que ser Humilde, pues la Gloria solo pertenece a uno, y Su nombre es Jehova.
Concluimos la enseñanza tal como lo hace el Proverbista, así como provee el problema, también brinda la solución, así como reconoce los Espíritus Altivos, también honra los Humildes. El dice; “Mejor es Humillarse con los Pobres, que Repartir con los Soberbios.” El Proverbista reconoce que no hay mejor compañía que andar con personas sabias, pero también humildes. Aquellos que no nos convencerán de sus fortalezas, sino que nos ayudarán a reconocer nuestras debilidades, para entonces ambos ser fuertes en Cristo. Humillarse bajo este contexto, también hacía referencia a lo opuesto de Altivez, así como ellos se convencen de ser Más Grandes, los Humildes reconocen que son pequeñitos, mucho más pequeños que Dios, pero que junto a Su ayuda, aun siendo pequeñitos, podrán cruzar grandes barreras. Los Humildes buscaban que su Mente y Corazón viviera en lugares Bajos, para que Sus Espíritus fueran Fortalecidos por Jehova, el Más Grande de todos. De igual manera, cuando hace referencia al Espíritu, esto habla de su interior, su mentalidad, su manera de vivir, lo que eran, pero también lo que hacían. Un Espíritu Humillado, era aquel que era Humilde no solo ante Dios, sino ante todo lo que Hacía. Hoy más que nunca, seguimos necesitando la Sabiduría del Proverbista, pero también su Consejo en cuanto a la Humildad, hemos visto Diversos Espíritus Altivos ser Derribados, pero también hemos visto muchos Corazones Humildes ser Levantados, aquellos que fueron Fieles en lo Poco, para así ser Recompensados en lo Mucho. Así como han Existido Multitudes de Altivez, siempre existirá un Remanente de Humildad, Despreciado por el Mundo, pero Amado por el Cielo.
Seremos de la Multitud Altiva, o del Remanente Humillado?
"Así como han Existido Multitudes de Altivez, siempre existirá un Remanente de Humildad, Despreciado por el Mundo, pero Amado por el Cielo"
Autor: Jorge Colón
theoreihub@gmail.com
6.02.2025