Opresion en Egipto, Redención en el Desierto

Éxodo 4:21 - 21Y dijo Jehová a Moisés: Cuando hayas vuelto a Egipto, mira que hagas delante de Faraón todas las maravillas que he puesto en tu mano; pero yo endureceré su corazón, de modo que no dejará ir al pueblo. 22Y dirás a Faraón: Jehová ha dicho así: Israel es mi hijo, mi primogénito. 23Ya te he dicho que dejes ir a mi hijo, para que me sirva

Es interesante notar tanto las frases e historias que llegan a nosotros sin sentido alguno, como también aquellas que tienen la habilidad de permanecer e impactar nuestras vidas para siempre. Cuántas veces no hemos escuchado frases que nunca olvidamos, pero también frases que nunca recordamos? Muchos factores influyen en nuestra retención, tal como nuestra mente, atención, y condición en el momento, sin embargo, historias y frases como las tales (Éxodo 4:21) tienen el poder de Adentrarse en nuestro Corazón de tal manera que aún hoy, más de miles de años no olvidamos no tan solo cuando Dios sacó al pueblo de Egipto, sino también las instrucciones de tal misión. Unas instrucciones las cuales mucho más que brindar LIBERTAD al pueblo, estas también elevan ADORACIÓN y SERVICIO al SEÑOR. Moises no es tan solo de los personajes más conocidos en la Biblia, su llamamiento también es vital, Dios otorgó gran privilegio a Moises como líder y voz del pueblo, pero tal privilegio iba de la mano con una gran demanda la cual no podrá ser negociada, Dios quería que Su Pueblo volviera a Él, para Él también Volver y Permanecer con Su Pueblo. Dios tenía un Propósito para Su Pueblo, pero Él también tenía un Reto, tanto para los Recipientes de tal Propósito, como también para el Faraón y los oponentes del mismo. 

Dando un vistazo al contexto y el objetivo de Dios para el pueblo, podemos recordar cómo Israel se encontraba bajo gran opresión Egipcia. Debido a su antepasado, pecado y consecuencias, Dios permitió que el pueblo pasara por tal opresión, brindando un escenario el cual pareciera que no habría esperanza, uno que provocara que el pueblo necesitara un cambio, para así Jehová Dios darse a conocer nuevamente y mostrarles que solo El, y no el Faraón, podía ser el Redentor y Sustento de sus vidas. Como todo propósito y misión en Dios, esto no sucedería de la noche a la mañana, el pueblo iría aprendiendo paso por paso, ya que la meta final no era Sacar al Pueblo de Egipto, sino Remover la Identidad Egipcia de ellos. Es por esto, que los sucesos en Egipto junto a las Plagas, fue solo el comienzo de lo que Dios quería hacer. Allí Él mostró su Divinidad sobre los supuestos dioses existentes, sobre los magos, al castigar pero también demostrar que una cosa era IMITAR, y otra observar al verdadero Dios OBRAR. Es por esto que hubo obras que muchos imitaron, pero hubo muchas que tampoco pudieron, solo Dios podía dar y quitar vida, por eso las plagas culminan con la Muerte de los primogénitos y la redención de los Escogidos. Solo Jehova Dios podía Castigar y Preservar al mismo tiempo, Sólo Dios podía Derramar Sangre y Cubrir a otros con Ella. No olvidemos, Dios siempre está en control de todo, aun el endurecimiento de Faraón, fue utilizado por Dios para Exaltar Su Santo Nombre, aún el orgullo de Nabucodonosor, la Traición de Baalam, la desobediencia de Saul, entre tantos… resultaron en el cumplimiento de lo que Dios quería para Su pueblo. Bajo la opresión Egipcia, muchos Pensaban que Faraón era el Grande, pero en realidad, fue solo una antesala para que Jehová Dios, el Verdadero Gigante plasmara Su Huella en Israel, pero también en los Egipcios y el resto del mundo. Pues luego de tal suceso, se solía escuchar y decir que Jehova Dios, no Moises, no Aaron, fue El que sacó al pueblo de Egipto. Muchos temían, muchos temblaban, muchos se estremecían al escuchar tal suceso, pero de igual manera, muchos abrieron sus corazones y decidieron SERVIRLE Y ADORARLE. 

Es común regocijarse al ver lo que Dios hizo al Librar Su Pueblo, sin embargo, mucho más que regocijarnos en tal Victoria, también tenemos que Meditar en el Requisito y Propósito de la Misma. Eso fue parte del problema de las futuras generaciones las cuales escucharon sobre la Victoria, mas no vivieron el Requisito. Recordemos, el pueblo, al pasar el tiempo continuaron fallándole a Dios, sirviendo a ídolos y abrazando las identidades de aquellos que los rodeaban o gobernaban sobre ellos. Por lo tanto, bajo la opresión Egipcia, ya el pueblo estaba en una condición en la cual Faraón y Egipcio pasó a ser Su Señor , aquel que gobernaba y les influyó en cómo vivir y como ser. Como parte de tal opresión y crisis de cultura e identidad, el pueblo también perdió el Factor Adoración y Servicio a Jehová. Es interesante notar cuando Dios le pide a Moises que diga a Faraón que es necesario que el pueblo Salga de allí no solo para ser Libres, sino para que Sirvieran a Jehová. Notemos, muchas veces se dice que el Pedido fue que Adoraran, sin embargo, era que Sirvieran a Jehová. Como parte del Servicio a Jehová, esto también incluía la Adoración, por eso vemos que Jehova también pide que el pueblo salga a Celebrarle Fiestas, lo cual necesita Alabanza hacia Jehová, pero la meta principal era que Sirvieran a Jehová. “Servir” en tal contexto, hablaba de un Servicio Urgente y necesario, Jehova mostró urgencia, aun ante la demora del Faraón endurecido, el cual prefirió Interponerse y no Ceder al pedido. Jehová sabia que habia una Relacion que Reparar con Su pueblo, Él sabía que el pueblo necesitaba un cambio, pero mayor aun, Jehova deseaba la Adoración de Su pueblo, y tal deseo fue por encima de la opresión y de la condición del pueblo, moviendo a Jehova en Gracia y Amor por ellos. Jehova no NECESITABA la Adoración del Pueblo, Jehová DESEABA la Adoración de Su Pueblo. De igual manera, Dios no necesita mi Alabanza, pero Él desea tanto nuestra Voz, como nuestro Corazón. 

Dios había creado al hombre para que el mismo fuera de Servicio, Alabanza y Gloria para Él, por lo tanto, el pueblo de Israel, también fue escogido para lo mismo, este debía brindar Alabanza y Exaltación a Jehová. Si Adan fue creado para Servir y Adorar, si Israel fue Escogido para Servicio y Adoración, cuanto más no lo será Su Remanente en el Siglo 21? Si Dios no Cambia, tampoco Sus Planes y Su Deseo, así que Dios deseaba la Adoración y Servicio de Israel, aquellos que llevaban años dando su Servicio al Faraón, todavía Dios sigue pendiente a aquellos que aun no le Sirven, para que así como en Egipcio, Jehova se dé a Conocer, y todos tiemblen y se postren ante Su Presencia. Hoy Dios nos recuerda, existe un Faraón, un Mundo, un Gobierno Terrenal que quiere tanto tu Adoración como Servicio, pero Jehová, Fuerte y Valiente, aún nos Desea, nos Ama, y quiere que nuestro Servicio, nuestra Vida, Adoración, ya la Sangre fue esparcida sobre las puertas de nuestros hogares, ya nos libró de las Plagas, ahora solo falta un pueblo que Salga de Egipto, que Renuncie al Faraón y vayan a Celebrarle fiesta en el Desierto. 

Los Oprimidos Sufren al Laborar en Egipto, pero los Redimidos, Celebran la Redención en el Desierto.